Capítulo 21
Gerard
“Ahora soy todo tuyo, no tengo miedo
Y vos sos todo mío, digan lo que digan”
Mi celular sonó, un número conocido, una voz muy familiar… y un Te amo del otro lado de la línea.
Dos golpes en la puerta de mi habitación.
Y su presencia.
Abrí la puerta y casi me morí de risa cuando vi a Frank con una rosa que sostenía apretada entre sus dientes
-Jajaj que es todo esto? - Le dije aun sosteniendo el celular todavía en mi mano, sin cortar, sin salir de mi asombro-
-Éste soy yo, siendo romántico ante la persona que amo…
-Me amas? Frank escuche bien?
-Te amo
-Puedo decírtelo yo también?
-Más te vale que me lo digas!
-Te amo! Te amo enano hermoso! Veni para acá! Al fin te tengo, al fin estás conmigo!
Lo arrastre tomándolo del brazo hacia dentro de mi habitación y el empujando con fuerza lo tumbé en la cama.
-Sacate esa rosa de la boca, que me vas a lastimar cuando empiece a comerte la boca..
-Mnnnaa, sácamela vos :D
Mordí el tallo y tiré la rosa al piso, al fin tenía la boca de Frank solo para mí. Lo tenía sobre mí, con esa sonrisa maravillosa, que extendía a lo largo de todo su rostro, lo tenía abrazado y jamás lo hubiera soltado, lo amaba tanto…
Corrí los mechones de pelo negro que se le venían sobre la cara y lo bese…
-Parece que el momento llego no? Dijo Frank poniéndose de pie
-Tenes ganas? –Le dije
-Ufff… que si tengo ganas?? Me muero de ganas!
Comencé a bajar el cierre de su cangurito rojo, hasta dejar el buzo abierto por completo, corrí una de las mangas, dejando al descubierto sus hombros, que comencé a besar hambriento, desesperado, como si se tratara de la última vez que lo besara, él llevaba puesta una remera rotosa abajo y se le veían los tatuajes de su brazo, corrí la manga del otro brazo y el buzo quedo apenas sostenido… el sonrió cuando fui por detrás para terminar de quitárselo, y desde allí comencé a hacer rodar mi boca sobre su cuello, sobre ésa piel de terciopelo, a la par que acariciaba sus brazos.
Me pegue a su espalda y su sonrisa se le borro en cuanto me apoye sobre él, y cambio por una expresión de excitación, su respiración comenzó a entrecortarse, al igual que la mía, pero yo quería ir lento, no tenía el menor interés por apurar las cosas.
Me apoye en el hueco de su hombro y le susurre al oído:
-Acercáte a la pared…
Frank me hizo caso, seguía de espaldas, yo comencé a moverme un poco más rápidamente, giro su cuello y comenzó a besarme, hasta que me detuvo apartándome con sus manos.
-Espera, espera… no… no debería ser así…
-Ahh hah y co-como debería ser—balbuceé agitado
Frank se alejo y busco un libro que había traído, en la tapa leí “El arte del Tantra, el sexo tántrico en seis pasos”, no pude evitar caer en la cama de la risa.
-Que es esto Frank? –Le dije sin poder parar las carcajadas
-“Esto” es tu sorpresa, vos reíte ahora, pero yo aprendí algo nuevo
-Confieso que me llama la atención… y que es esto del tantra?
-Veni que te muestro, vamos al piso, sentante enfrente mío con las piernas cruzadas, relájate y respira
Cerré los ojos respire profundo y exhalé, Frank hacía lo mismo, y al mismo tiempo que yo, nuestras respiraciones se habían sincronizado, me tomo de la mano y me puso de pie, me llevo a la cama, una vez allí comenzó a desvestirme, yo intente besarlo, tocarlo, pero el no me dejo, me quito primero la remera y luego comenzó a bajar el cierre de mi jean y a tironear de las piernas hasta lograr quitármelo, saco del bolsillo de su jean un aceite y se lo puso en los dedos, comenzó a pasármelo, primero en el pecho, fue bajando hasta seguir por mis piernas, tocándome, acariciándome todo el cuerpo
-No vas a pensar desvestirme Gee?
En cuanto me dijo eso me levante de golpe
-En serio me vas a dejar?
-Aha…
-Te voy a ver desnudo sabias?
-Esa era la idea…
-Ya no sentís vergüenza parece…
-Y cuando la tuve? –Dijo riendo y estiró los brazos hacia arriba, indicándome que quería que le quite la remera.
Tomé su remera de los extremos y comeze a subirla, los tatuajes comenzaron a aparecer, esos tatuajes que hace meses no veía, esa piel de colores que me vuela la cabeza, ese cuerpo que me dan ganas de poseer una y otra vez… seguí deslizando la remera hasta quitarla por completo… me mordí con tanta fuerza el labio inferior tratando de contenerme las ganas de hacerle de todo en ese momento que me lo hice sangrar, ante esto Frank se acerco y con su lengua quito la gota de sangre que comenzaba a asomar, lo tomé por el borde de su jean y lo acerque hacia mi, desabroche el botón y baje el cierre, lo quite con rapidez y lo arrojé en la cama.
-Asique aceites… y con mmm olor a rosas?
-Me habías dicho que no era romántico
-Y después decís que no sos gay jajaja
-No soy!! No soy eso… -Me dijo sacándome de encima suyo y volviendo a sentarse sobre mi-
Una vez que estuvo encima mío comenzó a deslizar su lengua suavemente por mis boca, a mover lentos sus labios sobre los míos, a introducir su lengua y moverla, creo que esa noche Frank me dio el beso mas largo que nadie me había dado en la vida.
-Te amo tanto Gerard…
-Yo también, te amo, te amo, nunca me voy a cansar de decírtelo
-Nunca es mucho tiempo… ya sabes lo que pienso –Me dijo Frank mientras recorría mi cuello con sus labios-
-Te parece mejor decir que te voy a amar para siempre?
-Es lo mismo! Yo me conformo con que me ames esta noche
-Te voy a amar esta noche, y la de mañana, y la de pasado mañana y… ….¿¿Frank vamos a hacer el amor?? –Le dije cuando caí en la cuenta de que sus besos habían llegado a una zona en la que si seguía besando iba a poner en su virginidad seriamente en riesgo.
-Vos que crees? – Respondió mientras me lanzaba un pequeño mordisco por arriba del bóxer-
-Sacámelo entonces – Me hizo caso y deslizo el bóxer por mis piernas hasta quitármelo, se acerco a mi entrepierna y con los labios apenas rozaba mi miembro, con la boca entreabierta comezo a besarlo, besaba la punta y con la lengua tímidamente asomada, lamio toda su extensión hasta la base, cuando lo lamio absolutamente todo volvió a concentrase en los besos en la punta.
Mi erección estaba a punto de estallar, por lo que muy a mi pesar tuve que apartarlo.
-Espera… a no ser que quieras mandar el Tantra a la mierda deja de hacer esa cosa espectacular que me estas haciendo!
-Ahh viste que no era para reírse? Te esta gustando!
-Me encataaaa!! Cuál es el siguiente paso? jeje
-Como venís de ahí abajo?
-Nunca me lo hiciste… nunca llegamos a que vos… me lo hagas a mi…
-También sos virgen entonces!? Jaja
-Si pero yo de verdad… vos sos un “virgen mental” yo lo soy de cuerpo
-Vamos a tener que reparar eso…
El inexperto (¿??) Frank se estiro para alcanzar nuevamente el aceite y se lo puso en sus dedos,
-Te animas entonces? –Me dijo
-Si… dale, ya esta, pero por favor se suave…
-Te lo prometo.
Sentí su dedo al introducirse en mi interior, era cálido y húmedo, el aceite impedía que sintiera dolor, por lo que se dio cuenta y comenzó a moverlo, Frank era increíble, se preocupaba por cada uno de mis gestos, por ver que estuviera disfrutando, que no sintiera dolor, y todo esto lo hacia mientras yo estaba envuelto de sus besos y caricias.
-Ya Frankie, ya no aguanto hacelo de una vez…-le rogué
-Nop!! leí que aunque estemos muy excitados tenemos que hacerlo todo en forma lenta
-Es que no soy de madera! Ya no aguanto más! Si sos mas lento me voy a venir con tu próximo beso!
-jaahha bueno, está bien… si me lo pedís así (>D)…
Comenzó a penetrarme lentamente, pero sin moverse, se introducía y salía de mí, mientras nos besábamos y acariciábamos, lentamente, como él quería… era su idea, su sorpresa, su regalo hacia mí y yo pensaba hacer todo lo que él quisiera… me iba a dejar hacer y deshacer, como siempre, a su antojo.
-Frank, amor… ya creo que me voy a venir
-Noo!!! Nooo espera! No respires!
-Quee mier??
Frank me agarro la nariz para impedir que siguiera respirando, me empecé a desesperar! Éste loco acaso me quería ahogar??!!
-Que haces Frank! –Le grité mientras lo sacaba de encima de mí tirándolo al otro lado de la cama
-Jajaja no te quiero matar, solo quiero evitar que acabes!
-Y de dónde sacaste que si no respiro no acabo?
-Del libro!! En el libro dice que hay que aprender a controlar la respiración y que si no respiras, no acabas!! …. Bue resulto no?
-Porque casi me matas de un susto!
-Exageradoo!!! Como siempre Gerard Way, sos un exagerado!!!
-Bueno me hubieras avisado!
-Naa es todo sorpresa jajajjja, Ok, ok, sigo… estás preparado?
-Aha…-Le dije mirándolo ahora con un poco de desconfianza, y convenciéndome de que mi hermoso Frankie realmente está loco (:D)
Frank volvió a penetrarme lento, y a moverse despacito en mí, siguió moviéndose pero ésta vez con movimientos circulares, mientras me acariciaba… sentía sus ojos mirarme fascinados, como si realmente estuviésemos sintiendo esto por primera vez, realmente era como si todas estas sensaciones fueran nuevas, como si en verdad los dos nunca hubiéramos tenido nunca antes sexo… era increíble. Yo separé un poco más las piernas, abriéndolas todo lo que podía, así él se acomodaba mejor sobre mí, sonreímos, pudimos sentirnos más profundamente… esto de hacer todo tan lento realmente era excitante
-Espera Gee… ahora soy yo el que va…uff
-Jajaja, si espero… aunque ya me dan ganas de…
-Mandar el Tantra a la mierda?
-Vos que crees?
-Que esto se puso demasiado romántico y lento y dulce, que no veo la hora de cogerte como te lo mereces
Ese es el Frank que yo conozco
-No se diga más entonces
Lo di vuelta dejándolo de espaldas y comencé a moverme rápido, con fuerza dentro suyo, no duré mucho haciéndolo ya que todo el asunto del sexo tántrico me habían dejado re caliente, y al parecer a él también, porque sentí como acababa casi al mismo momento que yo.
Caímos los dos agotados uno al lado del otro, Frankie, como siempre después del sexo –Aunque creo que a partir de ahora merecemos llamarlo “hacer el amor”- buscó acurrucarse sobre mi pecho… eso era algo que nunca había cambiado, él siempre terminaba durmiendo sobre mí, y yo siempre quedaba despierto jugando con su pelo, acariciando la piel de mi hermoso enano cada vez que se quedaba dormido como piedra.
-Te gustó la sorpresa mi amor? –me preguntó antes de quedarse dormido
-Me encanto… y lo que más me gusto fue que me dijeras que me amas
-A mí también… -Me dijo besando mi mano y mirándome directo a los ojos
Ya no había dudas, no había inseguridad, nos amábamos y todo era real.
Como hubiese deseado creer en Dios, creer en algo, en alguna fuerza superior… para poder haberle rogado que de verdad todo sea así para siempre.
Creí que con el amor bastaba para ser felices.